lunes, febrero 04, 2008

Saliendo del metro Etiopía a las 11 de la noche


Un cigarro para intoxicar la espera en la esquina de una lluvia mínima,
un suspiro mínimo después de liberar el humo con la vista entregada al asfáltico punto de fuga,
un taxi que ignora las señales de urgencia mínima por dejar la esquina.


Mi sombra huele a Bogart región cuatro,
mis pies casi fríos reniegan pacíficamente a ratitos,
mi calma guarda una caja de dinamita azucarada bajo el brazo para acompañar el café de don Jorge.


Un helicóptero a la caza de narcotraficantes mínimos piratas de agua dulce,
un celular mudo con delirios mínimos de saldo eterno minuto a minuto,
un mínimo esfuerzo con los ojos cerrados por regresar a donde la nostalgia da vuelta en u.


Mi corcel apocalíptico por un reino de feromonas,
mis ahorros hormonales por un as bajo las sábanas a media luz
y capitularía cíclicamente mis ganas de ganarte por una constante y actuada rendición de tu parte.


Al final,
un brindis por el último salto del puente peatonal de los concubinos condescendientes mientras el vendedor ambulante recoge toda la mercancía pirata.

2 comentarios:

Ōkami dijo...

snif!!!

Nicotina Producchions dijo...

buenisomas letras!!! en verdad muy bueno