Hoy tenía muchas ganas de charlar… no de escribir, pero al final del día me quedé con las ganas de una plática reconfortante y escribiendo letras insípidas pero sin compromiso (lo cual no es tan desagradable). La madrugada del domingo soñé que alguien dormía y logré que despertara (despertándome). El domingo empezó y terminó siendo uno de esos días en los que uno amanece solo y no es chido: hice el desayuno pero no lo llevé a la cama… y aprendí a hacer hot cakes. Quizá sólo soy alérgico a las tertulias… ¿dije adiós? Esta tumba me queda chica… compraré tiempo compartido en un panteón rococó: viviré mi muerte en una tranquila hipérbole letrosa... de nuevo. Hoy tenía tantas ganas de charlar… no de escribir.
martes, agosto 29, 2006
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5 comentarios:
Yo también me quedo con las ganas, y termino siempre escribiendo...
Hola :)
no es bueno quedarse con las ganas. luego salen esos granitos de agua.
me han dicho... :P
oh!
te traeré algo del concierto de mis strokes adorados :D
Si vendes tiempos en tumbas compartidas, soy cliente
Gab
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